
El Ayuntamiento de Santa Cruz procedió en la tarde de ayer a acordonar, de manera urgente, parte de la plaza de San Francisco ante el riesgo que presenta el mal estado del campanario de la iglesia, por lo que, “por precaución”, se decidió evitar el paso de peatones en esa parte de la plaza.
Tal y como confirmó a DIARIO DE AVISOS el concejal de Urbanismo, Carlos Tarife, “los técnicos de la Gerencia han comprobado que la estructura que soporta la campana no está en buen estado, por eso hemos decidido acordonar parte de la plaza por precaución, con lo que los restaurantes de la zona no podrán tener las mesas en esa parte del espacio público”. “Lo siguiente que haremos será ordenar al propietario que arregle ese campanario para que no acabe cayendo”, añadió el edil.
Sin embargo, a lo largo de la tarde, según informó el propio Tarife, el Gobierno de Canarias, que está realizando unas obras en el edificio contiguo a la iglesia, en el que se encuentra la sede del Tribunal Superior de Justicia de Canarias, informó a la Gerencia de que procedería al desmontaje de la campana el próximo martes, con lo que se podrá levantar el precinto de esa parte de la plaza. La misma administración informó a Urbanismo que será ella la que se haga cargo de la reparación de la estructura del campanario para devolver la campana en cuánto esté listo el arreglo.