La pandemia del coronavirus ha puesto sobre la mesa la brecha por la desconexión digital que sufren nuestros mayores y la soledad no deseada, en muchas ocasiones oculta. Esta situación aceleró la transformación digital y, si para algunos esto es una oportunidad, para otros es un muro difícil de superar y se están quedando atrás.
Hay que tener en cuenta que España es el tercer país más envejecido del mundo, con más de nueve millones de personas mayores de 65 años y más de tres millones que superan los 80, lo que esta circunstancia está generando es una brecha digital que se está dejando a gente atrás. En Canarias hay más de 200.000 personas que viven solas y el 25% son mayores de 65 años.
En Tenerife, la ONG Balanced World, ha puesto en marcha las acciones Mayores Conectad@s y Mayores@Resilientes que van destinados a nuestras y nuestros isleños veteranos. Ambos proyectos son gratuitos y están subvencionados por la Consejería de Derechos Sociales, Igualdad, Diversidad y Juventud del Gobierno de Canarias. La primera, se inició en el año 2020 y continúa de manera telemática, mientras que la segunda arrancó en el año 2022 con el objetivo de promover el envejecimiento activo de las personas mayores, en el apoyo psicológico, social, psicopedagógico y físico, así como fomentar su inclusión en la sociedad digital en la que vivimos inmersos. Más de 80 mayores de la Isla han participado en alguno de los programas.
Mayores Conectad@s tiene como objetivo principal “trabajar con personas que presentan situaciones de soledad, el aislamiento que conocemos como la soledad subjetiva, es la que se produce al estar rodeado de mucha gente, tener tiempo libre y ocio, pero tenemos el sentimiento de soledad social o de no encajar. Para que no aparezcan estas situaciones es necesario fomentar el envejecimiento activo.
Daniel García León, Trabajador Social de la ONG encargado del proyecto Mayores@Resilientes señala que “ofrecemos sesiones y talleres individuales y grupales de formación digital a personas mayores de 65 años para así mejorar su participación social y el fomento y desarrollo de las redes de apoyo, y así de paso mejorar su bienestar y calidad de vida, utilizando para ello intervención psicológica y formación digital”.
Esta formación digital que se les ofrece “intentamos conseguir una integración social en una sociedad tecnológicamente hiperconectada, previniendo así la discriminación a la que se están viendo sometidas las personas mayores por el desconocimiento de las nuevas tecnologías”. Para ello, el equipo formado por profesionales de la psicología, el trabajo social y técnicos de formación, desarrollan sus intervenciones “tanto de forma presencial, en sus propias asociaciones, como de manera telemática, conectándose con las personas beneficiarias a través de videollamadas de WhatsApp”. Como cada usuario es distinto en su aprendizaje, “hacemos una formación individualizada, a su ritmo, y también a la carta según sus intereses, intentando frenar la brecha digital y ayudarles en el uso de las nuevas tecnologías, iniciarlos en el manejo de aplicaciones y cumplir sus objetivos, algunos están ya satisfechos con enviar un WhatsApp, realizar una videollamada o enviar un correo electrónico, otros van más allá y necesitan usar la aplicación de su banco, tener un certificado digital, buscar información, etc., queremos empoderarlos en ese sentido y que sepan usar el móvil y cumplir sus objetivos”, recalcó.
Uno de los puntos básicos de Mayores@Resilientes es “hacer un trabajo de prevención de fraudes y estafas que pueden llegarles, sobre todo en las típicas cadenas de WhatsApp, que sepan que hay un peligro y que conozcan los riesgos que pueden entrañar esas cadenas y las redes. Nos demandan enseñarles a usar la aplicación del banco o la aplicación del Servicio Canario de la Salud, por tanto necesitan un trabajo muy personal e individualizado”, destacó.
Como trabajador social, Daniel García también destaca de Mayores@Resilientes que hacemos “un análisis de la realidad de cada usuario, donde vemos sus fortalezas y debilidades y ponemos el énfasis en sus necesidades y cómo paliarlas. Hay casos que pueden optar a una prestación y, si no la tiene o no la está disfrutando, se la damos a conocer y les ponemos en contacto con la Administración para su trámite”.
Asimismo, García recalcó el área de envejecimiento activo “pues les acercamos las agendas de actividades la isla de Tenerife, y las asociaciones de mayores y de todo que les puedan interesar”. Por último, también se realizan encuentros intergeneracionales con colegios de madera telemática, y presencialmente hay reuniones en Asociación de mayores o vecinales como El Chapatal en Santa Cruz o Antón Guanche en Candelaria”.
Para participar en este proyecto hay que ser mayor de 60 años, estar empadronado en cualquier municipio de Tenerife, disponer de un dispositivo inteligente (smartphone, tablet y/o ordenador) y con conexión a internet (mediante WIFI, cable o datos móviles), así como contar con capacidades cognitivas suficientes que permitan la utilización de los medios digitales. Los interesados deben ponerse en contacto con las Asociaciones de mayores o de vecinos más próximas, su Ayuntamiento o el Centro de Salud de su localidad.
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