La obra de la zona de charcos en la playa de Valleseco ya cuenta con un plan ambiental encargado de asegurarse de que no provoca afecciones al medio natural y marino que puedan dañarlos de forma irreversible, una vigilancia ambiental que se prolongará tras la finalización de la misma y de la que también se encargará la Autoridad Portuaria.
Para ello, el Puerto ha licitado una asistencia técnica para la realización del seguimiento ambiental de la fase operativa, en la que se detallan las acciones a realizar. Así, por ejemplo, se recoge la prohibición de pescar o realizar marisqueo en los “arrecifes artificiales” que se encuentran en torno a los diques. Esta asistencia técnica se licita por 55.722 euros y por tres años.
Entre las acciones a realizar está la de una campaña de educación y sensibilización ambiental, para ello, una vez que la zona de charcos esté abierta al público, se procederá a la instalación de paneles informativos en lugares visibles para los usuarios, donde se resalten de forma permanente los valores ambientales presentes.
En el apartado del paisaje, se procederá al mantenimiento de las zonas verdes, realizando las podas y reposiciones de marras precisas, efectuando tratamientos fitosanitarios si fuera necesario, abonos, etc.
En el medio marino, en la parte correspondiente a las comunidades marinas se llevará a cabo la caracterización de los ecosistemas de la zona de obras y de su entorno durante el funcionamiento de la zona de baños. Para ello se establece una superficie de conservación comprendida dentro de una distancia de 100 metros, a partir de la pleamar, con categoría de “Arrecife Artificial”, en torno a los diques, donde se propone la prohibición de la pesca y el marisqueo.
La calidad de agua y sedimentos se controlará mediante la realización de análisis físico-químicos periódicos. Además se procederá a la retirada periódica de cualquier residuo flotante (plásticos, cabos, botes, etc.), que pudiera quedar retenido en las aguas abrigadas.
En cuanto a los residuos, estos deben ser tratado de forma adecuada, al igual que se tendrá un adecuado mantenimiento y reparación de las instalaciones e infraestructuras. Además se caracterizará la situación sonora en las instalaciones.
Por último, antes de la época de lluvias se procederá a la adecuada limpieza de imbornales, canalizaciones de pluviales, cunetas, puntos de desagüe, para evitar inundaciones, obstrucciones, o rotura de elementos por la erosión.
También se llevará a cabo un control de las poblaciones de erizos, así como un control de los niveles de ruido.
Retraso
Tras la última visita de la dirección de obra, la empresa adjudicataria de la misma ha pedido una nueva prórroga para entregar la obra. De esta forma, de finales de julio, se ha pasado a una previsión de mediados de agosto.
Es la tercera prórroga que se pide, puesto que, inicialmente, la obra estaba previsto que se finalizara en el mes de abril, luego se pasó a mayo, julio, y ahora agosto. Aunque la parte marina está terminada, lo cierto es que el remate en la parte terrestre se está demorando más de lo previsto.
Por parte del Ayuntamiento de Santa Cruz, antes de recibir la obra, avanzan que comprobarán que todo cumple con lo recogido en el proyecto, y en caso de que no sea así, no recibirán la obra hasta que se corrija.
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