La Liga de Campeones FIBA empezó bien para el Lenovo Tenerife, que tras un susto en los primeros minutos ante el Cholet, supo recomponerse de la mano de Sasu Salin. Los canaristas logran dos objetivos con este triunfo: ‘recuperar’ a Salin y seguir creciendo tras sumar su tercera victoria consecutiva en un curso que no empezó de la mejor manera en las tres primeras jornadas.
El Cholet trató de imponer su ritmo de juego desde el primer momento, con Blakes como líder de su ataque (7-10). En un cuarto igualado, el último minuto fue fatal para el Lenovo Tenerife. Un parcial de 0-10 para el Cholet en esos 60 segundos llevaron el cuarto al 15-24 final. El Canarias solo había usado tres faltas en este cuarto.
Un triple y una técnica a Shermadini empeoraron las cosas (15-30). El primer tiempo muerto de Txus Vidorreta llegó con un parcial de 0-18 y con 15-32 en el marcador. Del 15-14 s ehabía pasado al 15-32 en cuatro minutos. Quedaba un mundo, pero Cholet iba creciendo poco a poco.
El parcial llegó al 0-20 (15-34) hasta que Salin, de tres, lo rompió (18-34) . Reaccionó entonces el Lenovo Tenerife, con otro triple del finés (23-34) y dos zonas insulares que incomodaban a los galos. El finlandés, otra vez, dio la cara, como hace siempre, llegando a los 15 puntos (con 5 de 5 en triples) para el 35-37. El parcial era de 20-5.
El finlandés estuvo de récord. Metió 22 puntos en este segundo cuarto, anotó todos los triples que lanzó (siete) y llevó a los suyos al descanso con 43-41.
Salió bien el Lenovo Tenerife tras el paso por los vestuarios, sobre todo, porque estuvo más fluido en ataque, manejando rentas de cinco tantos hasta los cinco últimos minutos de cuarto.
Los de Txus Vidorreta controlaron a su rival en defensa, incomodando, sobre todo, en la circulación de balón y aporvechando su talento para lograr la mayor renta hasta el momento a falta de solo diez minutos por jugarse (66-59).
Shermadini fue referente para el Lenovo Tenerife ante un Cholet que, ahora sí, mostraba cierto cansancio, sobre todo en defensa. Doornekamp, con un triple, puso una nueva máxima a favor de los locales (74-61) y dejando a los franceses con siete minutos para dar la vuelta a las cosas.
El Lenovo Tenerife aprovechó para recuperar sensaciones, cuando el Cholet se acercó (81-67), Vidorreta pidió tiempo muerto para que las cosas no se complicaran y los franceses acabaron, en cierto modo, entregados, jugándose todas sus opciones de remontada a base de triples para el 95-75.