El Ayuntamiento de Santa Cruz, a través del área de Movilidad, bajo la responsabilidad de Evelyn Alonso, y con la participación de la edil del distrito Centro-Ifara, Purificación Dávila, concluyeron ayer la primera fase de información y participación sobre la Zona de Bajas Emisiones, directriz que Europa exige a las ciudades de más de 50.000 habitantes, donde fueron convocados diversas asociaciones, comerciantes, vecinas y vecinos y colegios que están dentro del área de influencia de las restricciones al tráfico por la aplicación de esta norma que prevé que se vaya incorporando de manera progresiva en los próximos años.
Partiendo de una primera convocatoria general, donde los asistentes fueron informados de las ventajas que incorpora este instrumento de reducción de la contaminación del aire, mejorando así la salud y calidad de vida de los residentes, “se han desarrollado talleres para recabar las sugerencias de los sectores que se encuentran en esta área de influencia y que se recogerán en un informe para ser valoradas por los técnicos”, anuncia Alonso, y avanza que “ahora se convocarán a asociaciones específicas tanto profesionales como vecinales, culturales, etcétera, con la idea de extraer conclusiones más elaboradas y específicas”.
Para la regulación en la ZBE se habló de un calendario de implantación que regulará el acceso de manera paulatina durante los próximos 10 años, y si bien las restricciones comienzan en 2024, se estipula un periodo de adaptación de 6 meses, donde existirá el control de acceso sin sanción económica, tan solo se producirá una notificación a los infractores. Y con posterioridad, se realizará un seguimiento de los indicadores y su correspondiente incidencia en las restricciones en los años 2028 y 2033.
En cuanto a las excepciones, se permite el acceso, en función de la actividad a prestar dentro del área delimitada y su distintivo ambiental, a servicios públicos básicos como limpieza, retirada de residuos, zonas verdes, etcétera; de urgencias en la vía pública sobre suministro de agua, gas, electricidad o telecomunicaciones; transporte público de uso general y aquellos que den servicio a los establecimientos dentro de la ZBE; turismos que indiquen las empresas y autónomos cuya actividad se ejerza en un local ubicado en el interior de la ZBE, y aquellos que presten servicios o entreguen o recojan suministros en el área delimitada.
Además, también los vehículos que indiquen los propietarios de plazas de garajes particulares; los que accedan a los talleres de reparación de vehículos ubicados en ella; los que tengan por destino farmacias de guardia; los destinados a actos en la vía pública, y vehículos con categoría B y C de clasificación ambiental, que podrán acceder a la ZBE únicamente para estacionar en un aparcamiento de uso público o privado.