Bajamar fue uno de los mejores destinos vacacionales de Canarias en la década de los sesenta del siglo pasado. De hecho, “llegó a convertirse en el segundo centro turístico de Tenerife tras el Puerto de la Cruz”, según explican Carlos García, Carmen González y Carmen Toral en el libro Bajamar, un pueblecito norteño.
En aquella época dorada del pueblo, que se ubica en la costa lagunera, se construyó el Hotel Neptuno que, tal y como anunció el Ayuntamiento en mayo de 2023, será demolido. Esta semana, el medio inglés The Sun se ha hecho eco del estado actual del icónico establecimiento hotelero que “alguna vez fue popular entre los británicos”.
El Neptuno se convirtió en uno de los principales referentes del boom turístico que experimentó la costa lagunera, principalmente en Bajamar y Punta del Hidalgo. Sin embargo, la construcción de la Autopista del Sur y la apertura del Aeropuerto Reina Sofía en 1977 trajeron consigo el desarrollo turístico de sol y playa en el sur de la Isla, entrando en decadencia los mencionados núcleos costeros de Aguere.

“Ahora parece más un aparcamiento a medio construir que un destino de vacaciones respetable”, señala The Sun en el citado artículo, que a su vez destaca el abandono del inmueble. “Aquellos que estén dispuestos a visitar la monstruosidad permanente verán un edificio cubierto de grafitis, sin color y que contiene una piscina seca”, añade.
Del esplendor del Hotel Neptuno, que languidece en medio del abandono, poco queda. Cerró sus puertas en 2007, tras la quiebra de la empresa. Desde entonces, el edificio ha estado abandonado y ha sido objeto de actos vandálicos, con múltiples pintadas e incluso reiterados incendios, que lo han dejado en un importante estado de deterioro.