En lo que va de año, se han producido un 39% menos de detenciones de migrantes llamados irregulares en la UE que en el mismo período del año pasado, si bien los casos registrados en Canarias y en la frontera con Bielorrusia se triplicaron y doblaron, respectivamente, según la Agencia Europea de Fronteras (Frontex).
En un informe publicado ayer, Frontex indica que, desde enero de este año, hubo unos 140.000 intentos de entrar ilegalmente en la Unión Europea (UE), cifra inferior a los aproximadamente 225.000 casos de los primeros ocho meses de 2023.
A pesar de este dato, Frontex informa de que fue la región de África occidental (Canarias) donde más se incrementó esta migración y las 25.500 intervenciones efectuadas desde enero triplicaron las llevadas a cabo en el mismo período del año pasado.
Asimismo, en la frontera bielorrusa con Letonia, Lituania y Polonia, los agentes migratorios interceptaron a 11.300 personas en lo que va de año, casi el doble que entre enero y agosto de 2023.
Por otra parte, la Agencia Europea de Fronteras certificó un descenso de la migración irregular en el Mediterráneo central (41.250 casos, una caída del 64 %), algo que se ha logrado, dice el informe, “gracias a las medidas preventivas de las autoridades tunecinas, libias y turcas”.
En el caso de Turquía, Frontex asegura haber detectado un cambio en los procedimientos empleados por las redes de migración ilegal y los agentes han encontrado un uso mayor de lanchas motoras.