El desarrollo de nuestra sociedad, desde la revolución industrial, ha sido posible gracias a la energía que hemos obtenido de los combustibles fósiles. Pero es la hora del cambio energético, el planeta exige nuevos retos. Obtener las energías limpias que nos ofrece la propia naturaleza a través del viento, del sol y ahora del calor que hay bajo nuestros pies. El Cabildo de Tenerife, a través del Instituto Tecnológico de Energías Renovables (ITER) y el Grupo DISA, han puesto en marcha un proyecto de enorme potencial energético para nuestra isla en un futuro cercano: la geotermia.
Ya sabemos que se puede capturar la radiación del sol, a través de placas fotovoltaicas, para convertirlo en energía eléctrica. También la obtenemos con la fuerza del viento. Pero la implantación de estas energías renovables requiere de grandes superficies donde instalar la tecnología necesaria para captarlas, y Canarias ya no dispone de superficie disponible.
Para la obtención de la energía geotérmica se requiere una inversión más elevada que en el caso de todas las anteriores. Sin embargo, ofrece dos importantes ventajas sobre el resto de renovables. La primera es que, una vez encontrado calor, la energía se obtiene durante las 24 horas del día los 365 días del año y durante los próximos 1.000 años. La segunda es que la ocupación del suelo es mínima, del orden de 30 MW en menos de media hectárea. Estos dos aspectos aportan a la geotermia una eficiencia 100 veces superior al resto de renovables.
Tenerife: un lugar ideal
Si se desciende lo suficiente a través de la corteza terrestre se terminará encontrando calor. La temperatura del interior del planeta aumenta progresivamente con la profundidad, en un fenómeno conocido como gradiente geotérmico, hasta el punto que en su núcleo se superan los 6.700 °C, una temperatura más alta incluso que la superficie visible del Sol.
Sin embargo, el viaje a las profundidades es complejo. Para poder encontrar altas temperaturas a relativamente poca profundidad, 2 o 3 kilómetros, se requiere estar en una zona volcánica como Canarias, donde el subsuelo sigue manteniendo bolsas de rocas a altas temperaturas. Con este material se puede generar una energía ilimitada.
Con el concurso de la Unión Europea, a través de los fondos NextGeneration y del Instituto para la Diversificación y Ahorro de Energía, el Cabildo de Tenerife y el Grupo DISA lideran un proyecto en búsqueda de recursos geotérmicos que puedan ser aprovechados para la producción de energía. Es un proyecto público-privado que se realiza además con el apoyo de Reykjavik Geothermal, una de las más importantes empresas en este sector en Islandia y en el mundo.
Pues bien, la magnífica noticia es que, después de meses realizando complejas mediciones han descubierto varios puntos de la isla donde puede haber el calor necesario para poder generar electricidad.
Energías limpias
Las instalaciones de una central geotérmica ocupan un espacio mínimo, la de una caseta de campaña. Su rendimiento, en términos de energía, depende de las altas temperaturas que se consigan, siempre por encima de los 150ºC.
La inversión en esta primera fase de estudios podría alcanzar los cien millones de euros, de los cuales cuarenta serán financiados por fondos europeos Next Generation. Es decir, el esfuerzo inversor es importante, pero la ocasión de encontrar calor, por primera vez en España y generar electricidad limpia y milenaria también lo es. Además, su coste siempre será inferior a lo que se abona actualmente por la generación eléctrica convencional en Canarias.