Inés Rodríguez (Tenerife, 1999), conocida por su trabajo como logopeda y creadora de contenido en redes sociales (@inusu_al), ha logrado una notable presencia en plataformas como Instagram y TikTok, donde cuenta con más de 200.000 seguidores. Su enfoque distintivo consiste en abordar la discapacidad con un toque de humor, lo que no solo hace accesible el tema, sino que también genera un impacto positivo en la percepción pública.
En una reciente entrevista ofrecida a nuestro equipo, Inés compartió que el uso del humor no fue una decisión consciente. “No fue una decisión activa hacer humor. Es lo que me sale solo. Y creo que eso es lo que le gusta a la gente. Que no sea forzado”, explica. Para ella, sus vídeos reflejan su vida diaria y las pequeñas situaciones que vive. Este enfoque auténtico resuena con su audiencia, quien aprecia la naturalidad con la que aborda temas complejos. Si bien reconoce que hay momentos en los que es necesario adoptar un tono más serio, el humor se convierte en su herramienta principal para conectar.
El impacto de su contenido ha sido notable. “Siempre ha tenido muy buena acogida”, asegura Inés. Sin embargo, enfatiza la importancia de un humor bien ejecutado: “No cualquiera puede o sabe hacer humor. Siempre hay que realizarlo desde el respeto”. A través de su estilo único, ha conseguido que su comunidad se sienta identificada y apoyada. “Al final las cosas cotidianas de la vida hay que tomárselas con humor. Si me pusiera a quejarme todo el rato en mis redes sociales, la gente estaría harta de mí”, añade con una sonrisa.
A pesar del crecimiento en sus redes sociales, Inés ha logrado mantener una perspectiva equilibrada sobre su uso: “Nunca he sido de engancharme a las redes y actualmente mucho menos”. Es consciente del impacto negativo del mal uso de estas plataformas y decide no prestar atención a los comentarios negativos. “A pesar de que no tengo muchos comentarios negativos. Procuro no mirarlos pero porque también mi mente necesita tener un descanso de la saturación que las redes pueden generar”, afirma.
En relación a los avances tecnológicos y su impacto social, Inés opina que la clave está en la educación. “La tecnología en sí misma está genial y avanza de una manera muy rápida y progresiva”, dice con entusiasmo, pero señala que debe haber un esfuerzo para educar a las personas en su uso responsable: “Ofrecer una buena educación de cómo debemos usar las redes y las tecnologías es fundamental para aprovechar al máximo sus beneficios”.
La inspiración para crear contenido puede fluctuar, algo que Inés reconoce abiertamente. “Si no hay inspiración, no subo nada”, dice sin titubear. Su enfoque relajado hacia la creación le permite ser auténtica: “Si lo fuerzo, no va a salir. Así que si me tengo que pegar 3 semanas sin subir nada porque no tengo inspiración, pues no subo nada y no pasa nada. Al final esto yo lo hago porque quiero, no porque viva de mis redes sociales”. Esto contribuye a que su contenido se perciba genuino y natural por parte de sus seguidores.
Inés también recibe mensajes conmovedores de su audiencia; muchos padres con hijos con discapacidades le han expresado cómo sus vídeos les han ayudado a ver la vida desde una perspectiva más positiva. Estos mensajes son los que más han sorprendido a esta divulgadora, quien agradece el gran abanico de información al que podemos acceder actualmente gracias a la tecnología. “Al final estos padres al ver a personas como yo, que con mi discapacidad puedo vivir perfectamente, pues eso les hace del mismo problema, tener una perspectiva diferente. A mí me hubiera gustado mucho que mis padres hubieran tenido este tipo de información. Es bueno que los padres de hoy en día, gracias a las redes, desdramaticen la situación”, comenta Inés.
En el dinámico mundo de las redes sociales, donde la exposición pública puede ser tanto un trampolín como un desafío, encontramos a una creadora de contenido y divulgadora que ha navegado por este entorno con sorprendente facilidad. Al preguntarle por las dificultades a las que ha tenido que enfrentarse en su andadura como creadora, Inés fue clara: “No he tenido grandes dificultades. Para mí, ha sido un camino bastante fácil y yo me siento muy cómoda con lo que hago”.
Su compromiso como divulgadora es firme, pero admite que hay ciertos temas sobre los cuales prefiere no pronunciarse públicamente. “Evitando mojarme en ciertos asuntos, me protejo de perder un público al que quiero y necesito llegar”, confesó. A pesar de esta tensión entre la libertad de expresión y la responsabilidad pública, enfatizó su filosofía: “Tengo que decir que me cuesta mucho callarme. Yo necesito expresar lo que siento. En ese sentido a veces soy un poco ‘boca chancla’”, admite divertida.
Mirando hacia el futuro, esta tinerfeña se muestra entusiasta ante los avances tecnológicos que benefician a las personas con discapacidad. “Me apasiona ver cómo están surgiendo sistemas de comunicación y tecnologías accesibles para la movilidad reducida”, afirmó. Mencionó innovaciones como los sistemas de seguimiento ocular y dispositivos que facilitan la comunicación, destacando que hace dos décadas esos desarrollos eran impensables
Sin embargo, también hizo hincapié en la necesidad de mayor inversión en el ámbito sanitario para garantizar que estos dispositivos sean accesibles para todos. “Si estos aparatos fueran menos costosos o se cubrieran al completo, sería una auténtica fantasía”, concluyó.
Finalmente, ante la creciente sensación de vértigo que pueden experimentar aquellos que desean incursionar en las redes sociales, su consejo es claro y directo: “Que hagan lo que les dé la gana”. En un espacio donde cada voz cuenta, animó a los nuevos creadores a expresarse sin temor. “Habrá a quienes les guste tu contenido y quienes no, como en la vida misma”, subrayó.
A través del humor y la autenticidad, Inés Rodríguez sigue rompiendo barreras y fomentando un diálogo abierto sobre la discapacidad, convirtiéndose en una voz inspiradora para muchos y demostrando que el optimismo puede ser contagioso.

“Esta nueva edición del evento es un hito importante para visibilizar el papel crucial que juegan las mujeres en el ámbito tecnológico. Creemos firmemente que su papel es clave para la innovación y el desarrollo sostenible”, afirma Carmen Pérez, concejala delegada de la Sociedad de Desarrollo. Con estas declaraciones, Carmen Pérez reafirma el compromiso del evento con el empoderamiento femenino y la inclusión en un sector que enfrenta grandes retos, pero también oportunidades emocionantes.
A su vez, la concejala muestra un gran entusiasmo por, en esta nueva edición, poder contar con la participación de Inés Rodríguez: “Inés es un ejemplo brillante de cómo la pasión y la dedicación pueden abrir puertas en el mundo de la tecnología y las redes sociales. Su trayectoria y su compromiso con la inclusión a través del humor hacen que su presencia en este evento sea fundamental. No solo aporta su experiencia, sino que también motiva a otras personas a seguir sus pasos y a potenciar sus capacidades diferentes”






