Efectivos adscritos a la Comandancia de la Guardia Civil de Santa Cruz de Tenerife han realizado seguimientos en los últimos meses y han investigado el tráfico comercial de dos locales clandestinos en los que se vendía a mitad de precio la totalidad de prendas que conforman la equipación oficial del Club Deportivo Tenerife.
Según ha podido confirmar DIARIO DE AVISOS en fuentes de la investigación, en el transcurso de la operación, que aún permanece bajo secreto del sumario en los juzgados de Santa Cruz de Tenerife, se ha localizado a los responsables de estos dos establecimientos ilegales ubicados en las inmediaciones de San Benito (La Laguna) y Las Chafiras (San Miguel de Abona), al igual que se ha procedido a identificar a varios empleados del club que presuntamente estarían implicados en la desaparición del material deportivo para su posterior venta fraudulenta.
DIARIO DE AVISOS ha contactado con el consejero y segundo mayor accionista de la entidad, Rayco García, que ha declinado realizar declaraciones, porque, según manifestó, “el asunto está en manos de las autoridades competentes”. Tan solo ha confirmado que fue él personalmente y el vicepresidente del club, Ayoze García, quienes procedieron a formular la correspondiente denuncia ante la guardia civil, al detectar “gravísimas irregularidades” en los inventarios del material deportivo del club, a los pocos días de su incorporación al Consejo de Administración.
Entre los millares de prendas que se venden en estos establecimientos clandestinos, figuran camisetas con y sin serigrafía de los jugadores titulares del primer equipo, pantalones, medias y calcetines, chándales, y otros complementos que utiliza la plantilla y que están disponibles en los puntos oficiales de venta del Club Deportivo Tenerife.
Según ha podido saber este periódico, las pérdidas provocadas por el robo y la colocación de estos productos deportivos en el mercado podrían ascender a casi un millón de euros anuales en concepto de perdidas. Esta actividad fraudulenta, según se desprende de la investigación del caso, podría haberse extendido más allá de la última década, con lo que habría provocado al club un perjuicio de varios millones de euros.
Según los investigadores, este fraude ha contado con la colaboración necesaria de varios empleados del Club Deportivo Tenerife, cuyo interrogatorio por parte de la Guardia Civil y su posterior pase a disposición judicial, parece inminente.
Venta de prendas robadas
Las gestiones de los investigadores permitieron detectar que una vez la ropa y complementos eran sustraídos de las instalaciones del club, se podría estar dando salida al género de manera clandestina a través de locales ilegales en el norte y sur de Tenerife, a los que los compradores accedían tras la inserción de reclamos, anuncios y promociones que la trama colgaba en conocidas aplicaciones de internet, destacando la autenticidad de las prendas y su bajo coste, en relación al precio de las tiendas oficiales. En la publicidad promovida por los responsables de la trama se destacaba la disponibilidad de todos los productos originales de la marca Hummel, uno de los principales patrocinadores y suministradores de equipamiento del Club Deportivo Tenerife.
A mitad de precio
Durante la investigación se pudo determinar que las prendas estaban puestas a la venta en estos dos locales del norte y sur de la Isla, con las etiquetas originales de la marca y a un precio muy inferior al de mercado, tratándose de productos muy atractivos y comercializados actualmente en las tiendas oficiales del club.
Los agentes de la Guardia Civil comprobaron que se trataba de artículos que habían salido del circuito de custodia y almacenaje en las instalaciones del estadio Heliodoro Rodríguez López. Tras estas comprobaciones se estableció un dispositivo de actuación por parte de la Guardia Civil, con el que se llevó a cabo la intervención en estos locales ilegales de todas las prendas disponibles para determinar su procedencia. En jornadas previas a la intervención, un equipo de investigadores se hizo pasar por aficionados interesados en adquirir estas equipaciones a mitad de precio, realizando grabaciones minuciosas de los locales y de sus responsables.
Un análisis de las prendas determinó que la ropa intervenida formaba parte de la mercancía que tenía que haber sido almacenada para el uso exclusivo de la plantilla del equipo, y para los stocks destinados a la venta oficial en los distintos puntos autorizados en la provincia de Santa Cruz de Tenerife.
En este momento continúa el proceso de esclarecimiento de los detalles de cómo y cuándo la mercancía fue sustraída de los almacenes del club, así como la posible colaboración necesaria que implicaría a empleados de la entidad.
A su vez, se ha podido concluir que, para la práctica de este ilícito, ha resultado necesaria la participación en los hechos de algunos trabajadores con responsabilidad en la custodia del material deportivo, ya que la mercancía sustraída coincidía con la que no se había entregado a la plantilla del primer equipo, para su uso y cambio habitual. Todo parece indicar que los empleados investigados se apoderaron de las prendas de ropa con total impunidad mientras realizaban su actividad sin levantar sospechas en las propias instalaciones del club.
Tras las referidas averiguaciones, los agentes de la Guardia Civil establecieron un dispositivo en el que ya se ha identificado a varias personas, vinculadas con la presunta comisión de delitos de apropiación indebida, hurto continuado y receptación de material sustraído.
Los órganos oficiales del club contactados por DIARIO DE AVISOS, manifestaron desconocer los detalles de esta operación de la Guardia Civil, y rehusaron realizar comentarios o valoraciones sobre este escándalo hasta que se produzca un pronunciamiento del juzgado de instrucción que investiga el caso.





