
Frontex, la Guardia Civil y varias ONG coinciden en señalar que la inmigración clandestina que llega a Canarias por vía marítima está volviendo a repuntar. Es cierto que difícilmente se llegará a las cifras contabilizadas entre 2006 y 2010, aunque también es complicado prever hacia dónde se moverán las rutas migratorias los próximos meses. Hasta ahora, en cualquier caso, el número de sin papeles llegados este año al Archipiélago en pateras o cayucos supera la registrada en todo 2015. De hecho, con las 64 personas rescatadas el martes por Salvamento Marítimo -que llegaron la pasada madrugada al muelle de Arguineguín- son ya más de un millar los inmigrantes que han arribado a las Islas en barquillas clandestinas.
El año pasado, según datos de la Delegación del Gobierno, fueron 874, una cifra que era superior a la registrada los tres años anteriores juntos (170 en 2012, 250 en 2013 y 275 en 2014). La tendencia, pues, continúa al alza. Por ello, como publicó este periódico, la UE dotará de más medios a la Operación Hera, que vigila las costas isleñas. De las 64 personas rescatadas cuando se dirigían a Gran Canaria, una mujer tuvo que ser trasladada a un centro de salud por dolor abdominal. Junto a ella viajaban otras ocho féminas y 55 hombres, explicaron desde el 1-1-2.
Una ONG alertó a Salvamento de que la referida patera se encontraba a la deriva debido a las malas condiciones del mar. Tras ser localizada por un avión de la sociedad estatal, esta envió al encuentro de los inmigrantes la Guardamar Talía. Sin embargo, la lejanía del lugar en que se encontraban y el fuerte oleaje reinante, que hizo temer por la suerte de los sin papeles, determinaron, en todo caso, que el personal de Salvamento Marítimo no lograra alcanzarles hasta primeras horas de la tarde, cuando se procedió subirles a la embarcación de rescate y se emprendió el regreso a la isla, para acabar llegando a ella ya de madrugada. En el muelle de Arguineguín les esperaban fectivos de la Guardia Civil y la Policía Nacional, del Servicio de Urgencias Canario y de la Cruz Roja, que, según se explica en una nota de prensa esta organización humanitaria, les dieron ropa seca, mantas y alimentos y decidieron trasladar a un centro sanitario a la mujer que presentaba dolores para que se evaluara su estado.