El Centro de Datos (NAP) ubicado en el Instituto Tecnológico y de Energías Renovables (ITER), en Granadilla, y todo los elementos que lo conforman, como el superordenador Teide, cambiarán de aires. Esto será posible gracias a la incorporación de un nuevo sistema de enfriamiento que permitirá generar a las cuentas de la empresa insular dedicada a las energías renovables un ahorro importante en la factura de la luz. Esta iniciativa, que ya se ha comenzado a construir, supone una inversión de 278.000 euros, aunque se prevé que el coste será recuperado en pocos años.
La novedad de este mecanismo, cuya implantación es pionera en Canarias, es que se utiliza agua de mar, mediante la construcción de un pozo, según adelantó a DIARIO DE AVISOS el director del área de Tecnología del ITER, Jesús Rodríguez Álamo. En esta línea, explicó que la obra de este nuevo sistema que permitirá mejorar la climatización de todo el NAP, incluido el superordenador, está en ya curso, pero se prevé disponer de las máquinas necesarias para su pleno funcionamiento en un plazo de 12 semanas desde la fecha de adjudicación, que se calcula será antes de que finalice el año.
Rodríguez Álamo destacó que el ahorro previsto de energía está en torno a entre el 30% y el 40%, lo que daría un plazo de amortización del proyecto de unos ocho años, según los cálculos realizados desde esta empresa dependiente del Cabildo tinerfeño.
LA FACTURA DE LA LUZ
“Una parte importante de la energía que se consume en el Centro de Datos procede de la climatización de los equipos informáticos, por eso nos hemos planteado implantar este mecanismo de enfriamiento aprovechando la cercanía del mar, lo que redundará en una reducción importante del coste mensual de electricidad”, explicó el responsable del área de Tecnología.
Para ello se está procediendo a la construcción de un pozo, a la orilla del mar, que se dotará de los mecanismos necesarios que permitan aprovechar el agua, ya previamente desalada, en climatización. Además, Rodríguez Álamo señaló que una de las ventajas de este sistema es que cuenta con una mayor potencia frigorífica que el aire acondicionado convencional.
Una vez construido el pozo, se obtiene el agua de mar que se filtra y trata. Este líquido pasa a un sistema que transforma ese agua en aire para así poder enfriar toda la nave del NAP.
Este procedimiento es la primera vez que se usa en las Islas Canarias y permitirá utilizar las fuentes de energías renovables en sustitución de las tradicionales y con mejores resultados si cabe.
EL CABILDO RETOMA LA APUESTA POR LAS RENOVABLES
Uno de los retos que se ha marcado para los próximos años el Cabildo tinerfeños es recuperar la apuesta, de una manera decidida, por las energías renovables. De hecho, ha planificado una inversión de cerca de 45 millones de euros para el próximo decenio. Entre los proyectos que pretende llevar a cabo se encuentra la construcción de un nuevo parque eólico y otro fotovoltaico. Además, una de las novedades es la incorporación de la geotermia, y para ello se está haciendo ya un estudio de viabilidad.