Atraídos por el insólito formato de pregón al alimón entre dos personas de ámbitos tan dispares como pueden ser el reverendo Ismael Martín y la directora general de GF Hoteles, María Victoria López, más de 200 personas abarrotaron el antiguo convento de Adeje para abrir la Semana Santa del municipio.
Martín, que fue párroco en el municipio en la década de los 90, dejó una profunda huella de cariño y recuerdos en miles de personas que lo conocieron y lo recuerdan, aún con afecto, con sus cholas y su guitarra dando misa, tal como han señalado numerosos vecinos y vecinas en las redes sociales desde que se dio a conocer su presencia en esta importante cita pregonera, recuperada para este año.
Por su parte, María Victoria López es una empresaria reconocida y un ejemplo de cómo la mujer se va abriendo camino al frente de la dirección de iniciativas y proyectos de la envergadura de una cadena hotelera de primer nivel con amplia presencia en Costa Adeje.
Con estos ingredientes y la inauguración de la exposición Devoción y patrimonio: Instantáneas de la Pasión y Semana Santa de Adeje, la velada constituyó todo un éxito que, sin duda, marcará el arranque de las semanas santas de los próximos años en esta localidad sureña.
El alcalde, José Miguel Rodríguez Fraga, y uno de los actuales párrocos de Adeje, Honorio Campos Gutiérrez, fueron los encargados de presentar e introducir a los pregoneros en su particular al alimón. Rodríguez Fraga glosó la figura del reverendo, mientras que Campos explicó el perfil de la empresaria.
Ismael Martín centró su intervención en un recorrido por el significado de la Semana Santa, insistiendo en palabras como amor, fe, creencia y verdad, además de recordar con cariño sus años de párroco adejero, donde atendió y compartió vivencias con miles de personas. “En la Semana Santa hay que entrar, no es suficiente con observar lo que otros nos ponen delante”, subrayó el padre Ismael. “Si es así -añadió-, solo nos entretendremos con cosas distintas a las del resto del año; si entramos y nos metemos en su entraña, nos sentiremos protagonistas de lo que sucede. De esa manera -continuó-, la Semana Santa podrá ayudarnos a entender cómo una luz nueva nos invita a vivir todos los días y a renovarnos, hacernos nuevos o resucitarnos”. “Quedarse con lo externo es perderse la gran oportunidad de sentirse querido con la hondura del amor más grande, un amor hasta la sangre, que nunca terminaremos de entender ni agradecer”, comentó el sacerdote que actuó como pregonero y que insistió en que la Semana Santa “no termina el Viernes de Pasión”.
Por su parte, Victoria López centró su intervención en hacer un recorrido por el turismo, la fe, la religión y el patrimonio de un municipio como Adeje. “Turismo y tradiciones sí pueden convivir”, afirmó, al tiempo que animó a administraciones públicas y empresas a “adoptar planes o estrategias que sirvan de desarrollo turístico sostenible y que tengan en cuenta nuestro patrimonio histórico y cultural para que los visitantes se emocionen con costumbres como la Semana Santa de Adeje”. Después se presentó el programa y el cartel de la Semana Santa.