Más de 70 efectivos y 20 vehículos de la Unidad Militar de Emergencias (UME) del Ministerio de Defensa comenzaron ayer a desplegarse por el sur de Tenerife para reforzar las acciones contra el avance del coronavirus, tanto en la limpieza y desinfección de los espacios públicos como en las labores de apoyo a los cuerpos policiales en materia de seguridad ciudadana.
El destacamento ha fijado su base de operaciones en el pabellón municipal de El Fraile (Arona) y durante la mañana realizó las primeras tareas de seguridad en este núcleo sureño, Las Galletas y la Costa del Silencio. A lo largo de esta jornada la UME comenzará con los trabajos de limpieza y desinfección en la Estación de Guaguas de Los Cristianos y en la Plaza del Carmen. Está previsto que durante la semana el despliegue se traslade a distintas localidades de Arona, antes de continuar por otros municipios de la comarca.
El alcalde de Arona, José Julián Mena, recibió ayer en el salón de plenos del Ayuntamiento a los mandos de la Unidad Militar de Emergencia para diseñar la estrategia, preparar el operativo y coordinar el apoyo logístico.
Mientras, las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado intensifican estos días en el Sur la vigilancia para garantizar el cumplimiento de las limitaciones a las que obliga el estado de alarma decretado por el Gobierno en la medianoche del pasado domingo.
En el caso de Arona, la Policía Local había levantado hasta la tarde de ayer un total de 21 actas a ciudadanos que serán multados por incumplir el real decreto. En todos los casos se trataba de personas que circulaban o permanecían en la calle sin motivo alguno que lo justificara.
El caso más grave fue el protagonizado por un varón que practicaba deporte en la zona de Parque La Reina y cuando fue advertido de la infracción e invitado a regresar a su casa, comenzó a increpar a los agentes locales, por lo que fue detenido, según informaron fuentes municipales.
Desde el Consistorio de Arona se insiste en que los ciudadanos, tanto vecinos como turistas, se queden en sus casas u hoteles siempre que sea posible, y recuerda que las salidas están limitadas a compras en los supermercados y farmacias, para sacar al perro o para acudir a trabajar.
Además, recuerda que no están permitidas las reuniones sociales de ningún tipo.
La Corporación aronera anunció que prepara un paquete de medidas para paliar los efectos económicos causados por la pandemia. La primera será aplazar el pago de recibos como los vados, la basura o el rodaje, que se suman a la ampliación de plazos para pagar el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI). Por otra parte, el actual grupo de gobierno confía en que el Ejecutivo estatal autorice a los municipios económicamente saneados a utilizar el remanente de tesorería del que disponen, que en el caso de Arona supera los 100 millones de euros, para impulsar la actividad económica y ayudar a asalariados, autónomos y pequeñas y medianas empresas.
Por su parte, el alcalde de Adeje, José Miguel Rodríguez Fraga, apeló ayer a la responsabilidad para que los ciudadanos permanezcan en sus casas e hizo un llamamiento especial dirigido a los jóvenes. “No vale que digan que el problema no va con ellos; esto va con todos, porque está en riesgo el sistema sanitario”, indicó el regidor adejero, que subrayó la “enorme capacidad de resiliencia de nuestra gente frente a una situación límite”.
Rodríguez Fraga, que admitió las dificultades añadidas que afrontan los municipios turísticos, “con turistas en los hoteles a los que es más difícil llegar”, defendió las medidas adoptadas por las autoridades estatales, porque “la prioridad es la salud y seguridad”, y destacó el “testimonio de solidaridad” de la población. “Todos debemos cumplir las normas, se están haciendo las cosas que se tienen que hacer”, concluyó.
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