El Partido Socialista de Arona escenificó ayer la ruptura que existe en el grupo de Gobierno, tras votar divididos en una moción de la oposición que pedía la comisión de gestión del alcalde y otra comisión de investigación sobre el registro efectuado hace unas semanas en el área de Urbanismo. Seis de los siete concejales que están enfrentados al alcalde, tras el cese de Luis García en Urbanismo, votaron a favor de la moción. No estuvo presente en el Centro Cívico de Cabo Blanco, José Luis Gómez.
Los considerados concejales ‘díscolos’ votaron a favor desoyendo el mandato dado por el presidente de la Junta Gestora, David Pérez, que un día antes les había advertido de sanciones si no acudían a la sesión plenaria, como era la intención de estos siete concejales opuestos a su jefe de filas, José Julián Mena.
Asistieron todos, excepto Gómez, pero quisieron dejar claro las diferencias que existen con los que siguen siendo compañeros del grupo municipal Socialista, que además gobierna con mayoría absoluta. Ni siquiera el hecho de que ayer por la mañana el propio alcalde convocara para el martes la comisión de seguimiento de su gestión -en ella los portavoces municipales pueden preguntarle cualquier cosa- hizo que la oposición desistiera de presentar la moción, cambiando el añadido de crear una comisión de investigación por la de seguimiento, cuando conocieron el informe del Jefe de Servicio de Obras del área de Urbanismo en que afirmaba que en el registro efectuado en esa área solo se destruyeron duplicados (copias) de documentos, mientras que los originales permanecen.
Pese a ello, los cinco partidos de la oposición mantuvieron la moción sabedores de que iba a resultar un misil en la débil línea de flotación del alcalde. No por la comisión, si por la desunión.
Ventiladores para apagar una hoguera
Bochorno, pese a que caía la puesta de sol sobre Cabo Blanco. Normal que en el escenario del Centro Cívico estuvieran presentes unos cuantos ventiladores para refrescar una jornada que se presumía caliente, aunque prácticamente todo se resumió en la mitad del pleno cuando el grupo de Gobierno votó dividido; la mitad, la que quiere que Mena no siga de alcalde, apoyando a la oposición. El PSOE de Arona se quema en propia hoguera; ahora se sacarán los otros ventiladores y el día después traerá consecuencias.