adeje

Compran, con supuestos poderes, propiedades de rusos en Adeje

La administradora de La Duquesa denuncia que ya han “ocupado” cuatro viviendas y esperan otras cuatro, que los dueños en Rusia niegan haber vendido; la Policía Nacional investiga el presunto fraude
La urbanización La Duquesa consta de 49 chalets adosados y piscinas.

”Es un peligroso y novedoso método de okupación”, opinó Rebeca, la administradora de la urbanización La Duquesa, en Playa Fañabé, en el municipio de Adeje, sobre la situación de ocho de los 49 chalets adosados que conforman una comunidad de alto valor patrimonial.

Rebeca se refiere a las supuestas compraventas irregulares que se están produciendo con viviendas propiedad de ciudadanos rusos que ahora no pueden salir de su país, con motivo de la guerra de Ucrania. Según ella, al igual que señala Joe Schacher, presidente de la comunidad de propietarios, “una inmobiliaria ha podido comprar en Rusia y ha escriturado a su nombre, con poderes cuya legitimidad se desconoce, unas ocho viviendas, pero sus propietarios, con los que estamos en contacto, nos han confirmado que ellos no han vendido nada”.

Todo se destapó el lunes cuando el teórico nuevo propietario se acercó hasta la urbanización con una empresa de alarmas para cambiar las cerraduras y acceder a cuatro de las ocho viviendas que habría adquirido supuestamente por 460.000 euros cada una, cuando el valor de mercado de esos adosados supera los 720.000 euros.

Según reconoce Rebeca, “viendo los papeles que presentan con firma del notario, la compraventa parece legal, pero lo hemos denunciado, porque los propietarios rusos insisten en que no han vendido nada ni tienen intención de hacerlo”, como también reconoció Kyril, un asesor inmobiliario de uno de los afectados, que “ahora mismo está tratando de poder venir a Tenerife de alguna manera”.

Tanto la administradora del residencial como los propios afectados, a través de abogados, comenzaron ayer a investigar cómo se pudo fraguar esas compraventas ante notario, explicando Rebeca que “hemos hablado con el notario y nos dice que le vienen con poderes notariales de Rusia y con apostilla, y que no tiene cómo saber que son falsos; por lo tanto, a primera vista la compraventa parece legal”. Así, indicó que la operación se originó primero en Rusia y luego en Tenerife. Ayer este periódico no pudo localizar en el teléfono que aparece en la web correspondiente a ningún portavoz de la empresa tinerfeña.

La nueva compañía propietaria comenzó, al parecer, el lunes a ocupar los primeros cuatro inmuebles que habría adquirido, “colocando nuevas alarmas”, señalan Joe y Rebeca, y ante la Policía Nacional enseñaron los papeles que les acredita como nuevos propietarios, algo que “todavía está por ver”, insistían ayer, tras presentar la correspondiente denuncia ante la Policía, por lo que califican como una “okupación sofisticada”.

“Se trata de un nuevo método de okupación, porque nadie ha vendido y estamos todos muy nerviosos, con personas raras que no hemos visto nunca por aquí paseando por las noches por la calle”, comentaron.

Por lo pronto, la Policía Nacional, según Rebeca, ha trasladado a los notarios la demanda de la comunidad de propietarios de La Duquesa y ha abierto una investigación para saber el origen de esos poderes de venta que los propietarios rusos aseguran que no han concedido. Y no solo en La Duquesa, sino que también pudiera darse en otras urbanizaciones, según señalan, con propietarios rusos en la zona, quienes habitualmente son los que adquieren viviendas con un valor cercano al millón de euros y que en casi ningún caso ponen en régimen de alquiler o sacan a la venta, y menos por la mitad de su precio.

Rebeca tiene hoy previsto pedir una nota simple en el registro de la propiedad para averiguar respecto a las citadas cuatro viviendas y las otras cuatro, curiosamente también de dueños rusos, a nombre de quiénes están, si es que el grupo inmobiliario ya las ha revendido a particulares, algo que hasta ayer desconocían la administradora de La Duquesa y los propios residentes de la misma, nerviosos e inquietos ante lo que está sucediendo.

Colocan folletos para confirmar que los inmuebles están vacíos

Los vecinos denuncian que los supuestos nuevos propietarios colocan folletos en las puertas de los inmuebles. En caso de que no se retiren esos folletos, estos entienden que no hay nadie residiendo ahí y acceden para cambiar cerraduras.

TE PUEDE INTERESAR