La gerente de los Servicios Sanitarios de La Palma, Mercedes Coello, desmintió ayer las informaciones que apuntaban al Hospital Universitario de la Isla como responsable de que la semana pasada, al coincidir dos días festivos y registrarse tres muertes súbitas, se “amontonaran” los cadáveres en el complejo a la espera de realizarles las autopsias pertinentes. Y es que, según explicó la médico en su perfil de Facebook, el hecho de que solo existan dos forenses para todo el territorio insular está únicamente relacionado con “la Consejería de Justicia” del Gobierno de Canarias.
Así, la socialista indicó que el complejo que dirige “no tiene forenses en nómina, nunca los ha tenido y nunca los tendrá”. Una afirmación que realizó con tal rotundidad debido a que, al ser “un centro sanitario, solo hacemos autopsias clínicas, y esas las hacen los anatomopatólogos”. En este sentido, prosiguió diciendo que si al registrarse un fallecimiento repentino se ubican los cuerpos en el Hospital es, exclusivamente, “porque tenemos cámaras y se las cedemos a la Consejería, así como nuestras instalaciones”. Es decir, que se trataría de un acto de cortesía entre instituciones.
Por último, y como parte de su respuesta a lo que consideró “noticias falsas”, aclaró que “nada de lo que se está comentando” es culpa del complejo hospitalario. Asimismo, señaló a quienes difundieron dichas informaciones como divulgadores de bulos con conocimiento de causa: “Mucho me temo que quien lo está comentando lo sabe perfectamente”.
POLÉMICAS
Desde que accediera al cargo en 2019, Coello ha tenido que hacer frente a diversas crisis, tanto dentro como fuera de las puertas del Hospital palmero. En el plano exógeno, se halla la pandemia de la COVID-19, en la que destacaron sus llamamientos a la responsabilidad individual, como el afamado mensaje en que advertía sobre los riesgos de reunirse “en bodegas”, haciendo alusión a las concentraciones de una gran cantidad de personas en un espacio cerrado y reducido.
En lo referido a asuntos internos del recurso sanitario, cabe destacar la escasez de especialistas, que ha sido criticada por los grupos de la oposición en el Parlamento regional. Ante esto, desde su servicio se han reforzado las plantillas a lo largo de la legislatura, si bien todavía se registran quejas en este sentido.
El último episodio accidentado fue la marcha en noviembre del jefe de la UCI, Luis Ramos, que se jubiló lanzando duras críticas hacia los responsables de la dirección del centro.
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