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La cestería del castaño se acerca a los centros escolares de La Orotava

El Ayuntamiento presenta 'Mil historias en un cesto', un nuevo recurso didáctico sobre la importancia de este tipo de recipientes
La presentación del recurso didáctico tuvo lugar en el salón del plenos del Ayuntamiento villero.
La presentación del recurso didáctico tuvo lugar en el salón del plenos del Ayuntamiento villero. DA

La cestería es una artesanía en el mundo entero que consiste en crear cestos con las manos aprovechando materiales vegetales como raíces, tallos, ramas y cortezas. Esta actividad, que en Canarias es única, adquiere especial relevancia en La Orotava y, en concreto, en las zonas altas con la madera de castaño, con la que se fabricaba y se fabrican estos recipientes, duraderos y resistentes, que sustituyen a los de plástico.

Estos datos se incluyen en Mil historias en un cesto, un nuevo recurso educativo publicado por el Ayuntamiento de La Orotava y coordinado con la empresa Cultania con el objetivo de acercar la cestería del castaño y su importancia en la historia del municipio a los centros escolares de las medianías.

La publicación fue presentada ayer por el alcalde, Francisco Linares; el consejero insular de Agricultura, Francisco Javier Parrilla; su homólogo en el Ayuntamiento, Alexis Pacheco, y Yaiza González, coordinadora del proyecto.

El libro está dirigido principalmente a niños y niñas con edades comprendidas entre los 10 y 12 años. Asimismo, aborda, con un lenguaje sencillo y adaptado, así como con ilustraciones, información general del oficio de la cestería en el mundo, en Canarias y en La Orotava, todos los procesos artesanales necesarios para crear un cesto de castaño y los diferentes tipos de fibras y de modelos (de mano, canastra o banastra, raposa, garrafía o barca). También incluye actividades complementarias, fichas descriptivas y dos ejemplos de obras de arte que incorporan estos recipientes como un elemento destacado, como es el caso del monumento a la pescadora, en el Puerto de la Cruz, tallada por Julio Nieto, y el de Los Cochineros, en Icod el Alto, en el municipio de Los Realejos. Además, va acompañado de un audiovisual, financiado por el Cabildo de Tenerife, al que se puede acceder escaneando el código QR que recoge la elaboración en campo y los procedimientos de la fibra vegetal y el propio recipiente.

El alcalde lamentó que en los colegios no se lleven a cabo este tipo de enseñanzas, relacionadas con la cultura popular canaria, para contribuir a su conservación, proyección y divulgación. En ese sentido, adelantó que prevé trasladar esta iniciativa a la Dirección General de Centros, para extenderla a todo el municipio y a la Isla.

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