La presión por alcanzar la excelencia educativa es uno de los factores que han situado a Corea del Sur como el país de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) donde más suicidios se producen, según los datos disponibles en el Banco Mundial respecto a 2019. No es de extrañar que, en este contexto, la salud mental sea una prioridad para una nación preocupada por formar en habilidades emocionales a sus estudiantes.
Con ese propósito educativo, el artista surcoreano Staz Graffiti decidió llenar los 200 metros de largo y seis de alto que miden los muros del Ji Gok Elementary School, ubicado en la ciudad de Gunsan, de mensajes relacionados con el empoderamiento de los jóvenes. Especialmente en 2022, tras la pandemia de COVID, el grafitero se había dado cuenta de que era necesario subir los ánimos de los estudiantes.
El artista contó con la colaboración del tinerfeño Víctor Seus en la creación del mural, a quien conoció mientras ambos pintaban un tiburón de 15 metros con motivo del Chungjang World Festival organizado en Gwangju, otra ciudad coreana.
“Cuando Staz me pide que colabore con él en un mural relacionado con el escenario post-COVID mi enfoque se dirige hacia las emociones, la sensación de movimiento y la conexión con la fuerza vital“, describe Seus a DIARIO DE AVISOS.
El canario tiene una larga trayectoria en el uso del arte como herramienta pedagógica y suele involucrar a los más pequeños en sus procesos creativos, como con los talleres de Inteligencia Xperimental que impartía en el Colegio Nuryana o con el proyecto La ANTI*Escuela.
El mural de Víctor Seus en Corea, una mirada hacia el interior
Seus estuvo trabajando en Gunsan entre el 25 de octubre hasta el 18 de noviembre de 2022, tiempo que intercaló con su último trabajo en Tenerife, un mural realizado en el Cuadrilátero lagunero y que se inauguró ayer. Su obra es “una mirada hacia el interior” y en ella podemos ver a una mujer, Reka Fodor, artista y educadora de Transilvania a quien Seus conoció durante su estancia en Corea.
Seus también invita a repensar la forma en que nos comunicamos y cómo hemos vivido experiencias como la pandemia, donde el miedo estaba a la orden del día. Además, en sus obra siempre está muy presente “la glándula timo, que juega un papel fundamental en el desarrollo del sistema inmunológico”.
Sobre la figura de Fodor podemos ver en el mural a los pájaros Gachi, que son un símbolo de felicidad en el país asiático. Por su parte, los ojos abiertos de la parte superior del mural simbolizan “el despertar tras sumergirse en sí misma y hallar un mundo lleno de color“.
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