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Isabel Aguilar: “Hay que normalizar que necesitamos acudir al psiquiatra”

La presidenta de la Fundación Juana Reyes insiste en sacar los trastornos mentales ocultos y hablar más, sobre todo las mujeres, propensas a la depresión y la ansiedad por roles laborales y sociales
Isabel Aguilar: "Hay que normalizar que necesitamos acudir al psiquiatra"

La necesidad de mejorar la salud mental de la sociedad ha sido uno de los objetivos de la Fundación Juana Reyes para poner en marcha la campaña Salud Mental y Bienestar de la Mujer, que viene a visibilizar cómo y qué factores externos originan síntomas de ansiedad y depresión y que propone sacar a la luz esos trastornos mentales que están ocultos. La presidenta de la Fundación Juana Reyes, Isabel Aguilar, señala a DIARIO DE AVISOS que “es bueno que las personas hablen más de sus problemas”.


Sobre las motivaciones para iniciar esta campaña, Aguilar afirmó que “queríamos exponer que, debido a diversos factores externos y a un contexto sociocultural, está teniendo, por así decirlo, un impacto mayor en la salud mental femenina. Se trata de dar mayor información y visibilidad para mejorar la calidad de vida de las personas que sufren estos problemas. Este impacto nos viene a decir que su origen no es una vulnerabilidad biológica con respecto al hombre, sino que hay que subrayar que hay otros factores externos y roles sociales y culturales, tanto en la etapa adulta como en la adolescencia, que aparecen y originan síntomas, entre ellos depresión y ansiedad, por las altas responsabilidades y exigencias que afronta la mujer, no solo en su ámbito laboral, porque vivimos en una sociedad demandante y muy exigente, sino porque debemos asumir al mismo tiempo la responsabilidad de ser cuidadoras de los hijos y los mayores de la familia”.


Reconoció que “vivimos en una sociedad donde la longevidad es cada vez mayor y aumenta la gran cronicidad, por lo que la mujer desempeña un importante papel de cuidado y que es impuesto por roles culturales, y hace que se originen trastornos”.


Por otro lado, la experta, recordó que “también hay que tener en cuenta el factor de la soledad, cómo se ha hecho invisible por el rol cultural, y comienza a descuidarse. Así lo exponía la psiquiatra Natacha Sujanani en la campaña, y se ha visto cómo la mujer sufre diferentes duelos por esa soledad”.


Asimismo, en cuanto a los mitos a romper en la salud mental de las mujeres, Aguilar manifestó que “deberíamos hablar e insistir en que los trastornos mentales siempre son multifactoriales, pero es importante poner el énfasis en el factor sociocultural. Las mujeres también somos capaces de hablar y expresarnos más respecto a nuestros problemas, y esto quiere decir que manifestamos y exteriorizamos más nuestras emociones. Tenemos nuestra red de amigas que son muy importantes y ante las que manifestamos nuestras emociones, y aunque podríamos tenemos más ideas suicidas no se llevan a cabo, pues son mayores los porcentajes consumados en los hombres, quizás porque les cuesta más expresar sus emociones”.


Para la presidenta de la Fundación Juana Reyes, “es importante que se estén derribando estigmas y que las personas hablen más de sus problemas, porque ha habido mucho malestar emocional acumulado que ha salido a la luz tras la pandemia. Es evidente que más gente sufre alguno de los trastornos más comunes y acude al psicólogo con ansiedad o depresión. Todavía quedan grandes retos que habrá que contemplar y tenemos que normalizar que necesitamos ir al psiquiatra con la misma naturalidad que vamos al dentista o al ginecólogo”.

Salud física y mental
Ante el objetivo del Servicio Canario de la Salud de tomarse en serio invertir en salud mental, Isabel Aguilar insistió en “la importancia del binomio indisoluble salud física y salud mental como un todo. Claramente, hay que atajar a tiempo cualquier problemática, lo dicen los expertos y la Organización Mundial de la Salud, que destaca la importancia de los especialistas en Atención Primaria y hay que tener una red de apoyo cercana donde consultar y afrontar esos problemas a tiempo, tanto de manera presencial como telefónica o virtual. Quien padece una enfermedad mental acaba deteriorando su salud física e incluso acelera su muerte entre 10 y 20 años, por lo que es uno de los grandes desafíos a abordar. Invertir en salud física y mental es muy bueno, pues cuanta más calidad de vida haya, menos población acudirá al médico”, subrayó Aguilar.

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