Poco le ha durado a Santa Cruz de Tenerife la primera y única playa para perros con la que contaba el municipio desde finales del mes de febrero, la de Acapulco, en Valleseco. El alcalde, José Manuel Bermúdez, ha firmado una orden revertiendo el decreto que había dictado el área de Medio Ambiente, que dirige Carlos Tarife, y que permitía el acceso de los perros a este espacio, al menos hasta que se delimite la parte de la playa que estará destinada a las mascotas.
En el decreto firmado hoy por el alcalde, puede leerse que tras la petición del Plataforma en Defensa de Valleseco de que se prohibiera la presencia de perros, y que los técnicos municipales han avalado que se destine solo un tercio de la playa en cuestión para la mascotas, se toma la decisión de prohibir la entrada de canes hasta que se produzca esa delimitación. También se insta al área de Sostenibilidad Ambiental y Servicios Públicos a que realice un estudio pormenorizado sobre alternativas en el litoral del municipio para establecer zonas de baño habilitadas para perros.
El concejal de Medio Ambiente, que ha defendido la necesidad de que Santa Cruz cuente con espacios para las mascotas, expresaba en las redes sociales que “hemos pasado a tener de nuevo cero playas para nuestras mascotas en el municipio. Si soy alcalde de esta ciudad prometo tres puntos nuevos de baño para nuestras mascotas dentro de un proceso que llevaré a votación popular siguiendo las normas de participación ciudadana, los informes técnicos y proyectos que garanticen zonas acotadas para los perros”.