Calle Consistorio (antigua calle de la Cárcel)

Actualmente la calle comienza en la plaza del Adelantado, una vez superado los soportales del edificio del ayuntamiento, paralela a Herradores por la derecha y a Santo Domingo por la izquierda, llevando el nombre de Consistorio, porque en el comienzo de la misma está la sede de los edificios administrativos del Ayuntamiento de La Laguna. La entrada por esta calle a las dependencias municipales, está considerada arquitectónicamente como una de las fachadas más interesantes de la Ciudad Patrimonio de la Humanidad y también de Canarias.

Antiguamente se le conocía por la de la Cárcel, desde la época del “Concejo y Regimiento”. Hasta 1983 se encontraba en el interior del conjunto de los edificios municipales, que forman el ángulo entre la calle de La Carrera y la plaza del Adelantado. Las dependencias de la cárcel y depósito municipal de presos estaban a disposición de los juzgados. En la actualidad aun permanecen las instalaciones de la antigua prisión, si bien son utilizadas con otros fines.

Muchos republicanos fueron detenidos en esta prisión después del golpe militar de 1936, y algunos trasladados posteriormente a otras cárceles, salones adaptados para tal fin y “barcos prisiones”. Las mujeres republicanas, también cumplían la pena en este presidio lagunero, mezcladas con las reclusas comunes.

La oficina de denuncias del Cuerpo General de Policía que estaba instalada en los soportales municipales desde 1968, se trasladó al edificio conocido como el “Colegio de las Dominicas”. Más tarde se le agregó también una Compañía de Policía Armada en 1978, hasta el año 1983 en el que dicho Cuerpo de Seguridad fue trasladado a las actuales dependencias de la calle Nava y Grimón, en el edificio “Hamilton”, creándose la Comisaría de Policía Nacional de San Cristóbal de La Laguna.

El Archivo Municipal, ubicado en el edificio anexo de las Casas Consistoriales en esta calle, guarda más de dos millones de documentos del primer Cabildo de Tenerife, bien conservados, desde la fundación de la Ciudad hasta 1837. Está considerado “como la joya patrimonial y el archivo civil más importante de Canarias, sin duda alguna”, según palabras de su director, Luis González Duque. También aglutina el archivo donado por Manuel de Ossuna en testamento hológrafo de 1950. El Archivo Histórico Municipal además conserva toda la documentación que desde 1837 y hasta hoy generan las oficinas y unidades del Ayuntamiento Lagunero.

ANTIGUO COLEGIO DE LAS DOMINICAS

En el número 4 de la calle, en un edificio construido en el siglo XVIII y posteriormente reformado en varias ocasiones, y desde finales de 1907, con la reforma del arquitecto Mariano Stanga, las Dominicas Misioneras de la Sagrada Familia abrieron las puertas del colegio Santa Rosa de Lima, realizando una labor educativa que la Ciudad ha considerado positivamente y se lo ha reconocido. Este centro docente fue trasladado a las afueras del casco histórico y actualmente sigue prestando servicios en unas modernas instalaciones. El Ayuntamiento de San Cristóbal de La Laguna le concedió la Medalla de Oro de la Ciudad.

En el número 10 de la calle, por el lado derecho, en la vivienda de dos plantas y de estilo canario, nació Antonio Leal Martín, el 4 de junio de 1881, hijo de Antonio Leal y Leal y de Lucía Martín y Pérez. Fue bautizado el 17 de septiembre de 1881, por el sacerdote e historiador lagunero don José Rodríguez Moure, en el Sagrario de la Santa Iglesia Catedral (hoy parroquia de Santo Domingo). Antonio Leal Martín fue un filántropo lagunero, empresario y promotor del Teatro Leal, desaparecido misteriosamente en el trayecto de Sevilla a Madrid en el año 1936.

CALLEJÓN DE LA AMARGURA

La Amargura da nombre a un pequeño callejón entre esta calle Consistorio y la paralela de Santo Domingo. Este tramo de vía se utiliza para cruzar esas dos calles paralelas que terminan en la cercana plaza del Adelantado. Antiguamente se utilizó para acceder a la Cárcel Real. Este callejón ya aparece en el plano de Torriani, arquitecto, ingeniero e historiador italiano que elaboró en 1588 el primer plano de San Cristóbal de La Laguna.

El nombre de Callejón de La Amargura viene por la tristeza que les producía a los vecinos el ver como trasladaban a los presos cuando eran conducidos hacia la cercana prisión. “La cárcel estuvo en el edificio donde se instaló el Concejo y Regimiento; en tiempos en que era escribano mayor de dicho Concejo Antón de Vallejo”, según la historiadora Manuela Marrero.

CALLE OBISPO RUIZ CABAL (CALLE NUEVA)

La calle paralela al callejón de La Amargura comienza en Herradores y, tras cruzarse con la de Consistorio, termina frente a la iglesia de Santo Domingo. En realidad, más que una calle son dos callejones, hoy adoquinados, que se utilizan para cruzar entre calles de largo recorrido.

Según el periodista y escritor lagunero Domingo García Barbuzano, “El corsario Amaro Pargo fue propietario de ocho casas con graneros frente al convento de Santo Domingo”, que bajaba de la Cárcel Real y que llamaban calle Nueva, la cual, igual que las viviendas, construyó el corsario con una inversión de 51.174 reales. Las casas fueron construidas en solares que Amaro Pargo, de nombre de nacimiento Amaro Rodríguez Felipe y Tejera Machado, que nació en La Laguna el 3 de mayo de 1678. Fue un corsario y comerciante. Falleció a los 69 años y sus restos están enterrados en la cercana iglesia de Santo Domingo, desde el 4 de octubre de 1747. Dichos edificios fueron comprados a Matías Yáñez Felipe, Felipe Machado de Payba y Marcos Marreros. Algunas de estas viviendas aún se conservan y están actualmente en buen estado.

Esta céntrica calle lagunera, termina su recorrido en el encuentro con la plaza de San Cristóbal.

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