Santa Cruz de Tenerife contará con el primer rocódromo público en 2025. Un nuevo equipamiento destinado a la práctica de la escalada que irá ubicado en el complejo deportivo Las Delicias, en el distrito Ofra-Costa Sur, y que se ejecutará junto al Cabildo, dentro del nuevo Plan de Infraestructuras Deportivas de la Isla aprobado por el Consistorio insular.
El proyecto para iniciar la construcción de este futuro rocódromo será aprobado mañana en Junta de Gobierno municipal, donde el área de Infraestructuras presentará el decreto mediante el cual se declara la “urgencia” del procedimiento de contratación de los servicios de redacción de obra, ejecución, dirección facultativa y coordinación de seguridad y salud de los trabajos para su puesta en marcha.
Se aprobará y autorizará el gasto por importe de 18.221 euros con cargo al presupuesto de 2024 y, además, se autorizará el gasto futuro por valor de 12.147 euros, con cargo al de 2025.
El alcalde, José Manuel Bermúdez, destaca que “esta actuación en el distrito Ofra-Costa Sur representa un deseo expresado por las vecinas y los vecinos de la zona, por lo que la ejecución del rocódromo será de alta calidad”. En este sentido, el regidor resalta que “este tipo de instalaciones propician un impulso a la actividad física al aire libre y a la práctica deportiva, lo que conduce a tener una población con hábitos de vida saludables”.
Por su parte, el concejal de Infraestructuras, Javier Rivero, detalla que “en los pliegos se especifica que el objetivo de la instalación deportiva es que sea adaptable, funcional y multidisciplinar desde el punto de vista deportivo, competitivo, lúdico y terapéutico”. Por ello, especifica que “tanto la estructura de cuerda dificultad (o lead) como la de búlder (o escalada en bloque) deben poder modificar su diseño de presas a través de un diseño de vías profesional dirigido al nivel del usuario, desde el inicial hasta el avanzado y competitivo”.
Mientras, la responsable de Deportes, Alicia Cebrián, añade que esta infraestructura “es una apuesta muy interesante para el servicio, pues supone renovar nuestro compromiso con la escalada, un deporte al aire libre que cuenta con cada vez más participantes”. Por tanto, “cumplirá con todos los requisitos que se exigen tanto a nivel de seguridad como de competición y permitirá organizar eventos importantes en Santa Cruz referentes a esta práctica deportiva”.
Una infraestructura deportiva de 580 metros cuadrados al aire libre
El futuro rocódromo de Santa Cruz contará con un diseño del espacio libre en el que se tendrá en cuenta la seguridad entre estructuras y áreas o tránsito de usuarias, además de los agentes atmosféricos (exposición al sol, lluvia y afección de los vientos dominantes) que puedan afectar a la infraestructura, la cual dispondrá de espacios para escalada, infantil, entrenamiento y zonas de descanso-espera con jardines y iluminación y sombra.
La superficie para este espacio lúdico deportivo abarcará un área de 580 metros cuadrados y su diseño permitirá el acceso a las estructuras de búlder y lead con plataforma elevadora o tijeras de elevación para colocar las presas y los volúmenes de gran tamaño.
En cuanto a las características exigidas destacan que la estructura de búlder (o escalada en bloque) sea de 4,30 m. de altura mínima, con cumbrera protectora y colchoneta para recepción de caídas; la de lead (o dificultad) deberá disponer de 15,50 m. de altura mínima, con cumbrera protectora y pavimento amortiguador; contará con estructura horizontal en muro vertical de 20 metros de recorrido y altura de presa inferior a 2,50 m., para la iniciación y uso infantil; y tablas multipresas para entrenamiento de dedos de poliéster para uso exterior, así como jaula de calisternia para trabajar con el peso del cuerpo.
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