El nuevo ramal de salida hacia Oroteanda, ubicado en la autopista TF-1, en Las Chafiras, fue inaugurado ayer en un acto al que asistió el presidente de Canarias, Fernando Clavijo, junto al consejero de Obras Públicas, Vivienda y Movilidad, Pablo Rodríguez; la presidenta del Cabildo de Tenerife, Rosa Dávila, y el alcalde de San Miguel de Abona, Arturo González.
Esta nueva infraestructura forma parte del proyecto integral para la mejora de la movilidad en el sur de Tenerife, que tiene como objetivo principal reducir los problemas de tráfico en Las Chafiras y facilitar los desplazamientos de los más de 74.000 vehículos que circulan diariamente por esta arteria.
Aprobado en 2017 por la consejería de Obras Públicas y Transportes del Gobierno de Canarias, el proyecto fue adjudicado a la UTE Ferrovial Agroman-Ten Asfaltos-Excavaciones Oscar del Castillo y contaba con un presupuesto original de casi 22 millones de euros. A pesar de los plazos iniciales, que establecían 30 meses de ejecución, la obra ha acumulado una demora de más de tres años hasta su reciente apertura. Esta vía de interconexión, situada en el tramo que conecta San Isidro con Las Américas, se incluye en la construcción del tercer carril de la TF-1, aunque constituye una obra independiente.
Además del ramal de salida, el proyecto contempla la adecuación de carreteras secundarias que confluyen en este enclave, como las vías TF-65, TF-652 y TF-655, así como algunas calles del viario urbano de Las Chafiras. Estas nuevas adaptaciones, que contemplan la obra de dichas carreteras y también mejoras y reubicaciones de las paradas de guaguas, han sido concebidas para optimizar el tránsito de peatones y personas con movilidad reducida, ampliando las opciones de accesibilidad y mejorando la seguridad en el entorno.
OPERATIVO en su totalidad
El alcalde de San Miguel fue el encargado de cortar la cinta de inauguración y expresó su agradecimiento a ambas administraciones por el trabajo cooperativo que han logrado mantener durante toda la ejecución de la obra.
El enlace de Oroteanda, de esta forma, queda completamente operativo, permitiendo la circulación en ambos sentidos, tanto hacia Santa Cruz como hacia Las Américas, a través de un sistema de rotondas y vías colectoras. La infraestructura se compone de una glorieta elevada sobre el tronco principal de la TF-1, conectada por dos pasos superiores circulares que permiten el enlace de la TF-65 y los ramales en dirección a Santa Cruz, así como las vías colectoras hacia el sur.
Fernando Clavijo afirmó que esta apertura “supondrá la descongestión de una zona de gran afluencia” y señaló que se trata de “una larga demanda” que le ha recalcado tanto el alcalde de San Miguel y como el CEST, Círculo de Empresarios del Sur de Tenerife, catalogando el estatus de este área comercial como “el de uno de los polígonos principales de la Isla”. Javier Cabrera, presidente del CEST, una de las voces más críticas con el proceder de esta obra, catalogó la conclusión de la vía como “un paso más en está actuación, que tanto está costando acabar”.
En cuanto a las próximas fases del proyecto, se están realizando tareas de restauración ambiental, así como la instalación de las bases de apoyo para la señalización definitiva. La última etapa del proyecto contempla la colocación de la capa de rodadura en el trazado, lo que permitirá concluir la infraestructura de manera definitiva .
En su intervención, Rosa Dávila también subrayó la importancia de esta obra en la autopista TF-1, vía que calificó como “una arteria esencial por la que transitan diariamente más de 74.000 vehículos, entre todas sus conexiones entre el norte y el sur de la Isla”.
También aprovechó la ocasión para agradecer al Gobierno de Canarias y a todas las instituciones implicadas “el esfuerzo y apoyo continuos en este proyecto”. La presidenta del Cabildo añadió que esta actuación resulta fundamental para mejorar la conectividad de la TF-1 y “resolver el problema histórico” de atascos que afecta a la Isla, uno de los principales asuntos a tratar en la agenda de la población sureña.
‘PIMELIA TINERFEÑA COSTERA’
El consejero de Obras Públicas, por su parte, abordó una de las cuestiones más controvertidas en torno a la obra del tercer carril de la TF-1: la demora de más de tres años que ha sufrido. “Las circunstancias han sido diversas. No sé si recuerdan que, nada más comenzarse esta actuación, se encontró un escarabajo” -en referencia a la aparición de la pimelia tinerfeña costera, incluida en el catálogo de especies amenazadas de Canarias-, apuntando también que ejecutar unos trabajos así mientras la circulación sigue operativa “genera diversas dificultades y retrasos”.