El Ayuntamiento de Adeje aprobó ayer, por unanimidad, una iniciativa para explorar la creación de una ordenanza municipal que regule el alquiler de viviendas vacacionales en la localidad, en un esfuerzo por abordar la creciente problemática del acceso a la vivienda en el municipio. La moción la presentó el concejal de Podemos-IU, Gabriel González, bajo el título Regulación de viviendas de alquiler vacacional en Adeje.
En la exposición de motivos de la propuesta, el concejal del grupo mixto recordó que “Canarias ha experimentado un auge turístico sin precedentes. En 2023, las Islas recibieron más de 16 millones de visitantes, batiendo récords históricos en facturación y rentabilidad hotelera. Sin embargo, esta bonanza contrasta con los bajos niveles de renta, la pobreza y la exclusión social que afectan a buena parte de la población residente”.
Según datos del Cabildo de Tenerife, Adeje cuenta con unas 4.800 viviendas vacacionales con licencia activa, mientras que, como expuso González, un 25% de las casas con licencia permanecen vacías o sin actividad turística. “Este fenómeno ha contribuido a la expulsión de aproximadamente 10.000 adejeros y adejeras”, según el concejal del grupo morado.
El ejemplo de Granadilla
La moción busca explorar la creación de una ordenanza que regule la actividad vacacional en zonas tensionadas, siguiendo un enfoque similar al adoptado recientemente por Granadilla de Abona, que aprobó medidas para proteger el acceso a la vivienda de las familias locales. Entre las propuestas, destaca la restricción del uso vacacional a inmuebles ubicados en bajos, primeras plantas con acceso independiente o viviendas aisladas.
Asimismo, se prioriza la protección de los regímenes de vivienda social y aquellas en situación de fuera de ordenación, garantizando que estas queden excluidas de la actividad turística para preservar su función residencial.
El alcalde de Adeje, José Miguel Rodríguez Fraga (PSOE), subrayó la importancia de equilibrar la actividad turística con las necesidades habitacionales de los residentes. “La vivienda vacacional viene para quedarse, pero necesitamos tiempo para crear una regulación adecuada”, afirmó.
Por su parte, el concejal de Presidencia y Planificación del Territorio, Manuel Luis Méndez, destacó que, “en 2018, existían en el municipio 4.746 viviendas vacacionales publicitadas en plataformas digitales, pero sólo 211 estaban registradas oficialmente”. Aunque hoy el número de registros supera al de las viviendas activas, considera que “la falta de regulación sigue dejando desprotegidos a los propietarios frente a un alquiler tradicional”.
Desde el año 2000 hasta 2011, el municipio de Adeje experimentó un crecimiento poblacional de 11.000 personas, lo que propició la construcción de unas 1.000 viviendas sociales, explicó el edil.
Recientemente, el consistorio ha cedido dos parcelas para crear nuevas viviendas asequibles, una medida complementaria para aliviar la presión habitacional.