El Ayuntamiento de Granadilla de Abona ha elevado al Cabildo de Tenerife una demanda urgente para incrementar la frecuencia y el número de guaguas en la línea 010, que conecta el municipio con Santa Cruz, tras recibir quejas masivas de usuarios que se quedan “en tierra” diariamente en la parada de San Isidro.
La concejala de Movilidad Sostenible de Granadilla, Carmen Dolores Rodríguez, explicó ayer a este periódico que estas guaguas llegan “prácticamente llenas” desde el aeropuerto Tenerife Sur, dejando sin opción a cientos de trabajadores y estudiantes. A esto se suma la falta de iluminación en la parada de San Isidro, un problema que se arrastra desde hace meses.
La línea 010 es la principal (y más rápida) conexión de Granadilla con la capital. Sin embargo, su recorrido, que comienza en el aeropuerto Tenerife Sur, ha convertido el servicio en un “caos” para los residentes. Según la concejala, las guaguas llegan a San Isidro con pocas plazas libres, especialmente en horario laboral. “Suben entre 6 y 15 personas por viaje, mientras decenas se quedan esperando otra hora”, explicó Rodríguez.
Otros usuarios con los que ha hablado DIARIO DE AVISOS corroboran el problema: “Hoy entramos 12 personas en la guagua de las 10:55, que llegó a las 11:15. Más de 20 se quedaron aquí”, relató un viajero. Otro usuario lamentó la situación: “La 010 es ahora una guagua de turistas. Los vecinos nos quedamos tirados”.
Además de la saturación, la edil reclamó al Cabildo la reposición de la iluminación de la parada de San Isidro, ubicada en una rotonda y “prácticamente a oscuras” desde hace meses. “Es un riesgo para la seguridad y genera malestar”, recalca Rodríguez.
En paralelo, el ayuntamiento exige al Cabildo llevar a cabo dos medidas para paliar los problemas de movilidad: mejorar y ampliar el servicio de guaguas lanzaderas universitarias y crear un carril bus-VAO que una San Isidro con las zonas turísticas del sur, para agilizar el tránsito.
A pesar de las reiteradas peticiones, la concejala de Granadilla aseguró que el Cabildo no ha concretado soluciones a los problemas de movilidad planteados.
PARTICIPACIÓN EN TITSA
Con más de 50.000 habitantes, Granadilla adquirió el pasado noviembre una participación en Titsa, lo que le permitió ganar voz en el consejo de administración de la empresa del Cabildo. “Pronto tendremos líneas internas que conectarán núcleos alejados del municipio”, adelantó la edil.
El colapso de la línea 010 no es un caso aislado en la comarca sureña. Municipios como Arona o Adeje llevan años denunciando la insuficiencia de conexiones con Santa Cruz, un trayecto de unos 70 kilómetros que diariamente realizan miles de trabajadores, estudiantes y turistas. Para Carmen Dolores Rodríguez, la solución pasa por “priorizar el transporte público sostenible, no sólo con más guaguas”.