La más andaluza de las procesiones laguneras se celebró este Martes Santo en La Cuesta. Numerosas personas desafiaron el frío de la noche para congregarse en la plaza de La Candelaria y asistir a la cada vez más popular procesión del Encuentro, un acto que año tras año gana en número de seguidores.
Pasadas las siete de la tarde, la imagen de Nuestro Padre Jesús Cautivo ante Caifás partía de la parroquia de La Candelaria acompañada de la hermandad y cofradía de Jesús ante Caifás y Nuestra Señora de los Dolores. A esa misma hora, abandonaba la iglesia de la Paz y la Unión la imagen de María Santísima de los Dolores, en una espectacular salida del templo con sus costaleros rodilla en tierra para superar los estrechos márgenes del pórtico.
Tras un largo discurrir por las calles del barrio y atravesar la carretera general, la imagen de la Virgen, acompañada por la corporación municipal y la hermandad y cofradía de María Santísima de los Dolores, alcanzaba la plaza de La Candelaria, donde tenía lugar el esperado Encuentro con Jesús Cautivo, en uno de los momentos más espectaculares y emotivos de la Semana Santa lagunera.
Frente al resto de las procesiones del casco histórico de La Laguna, de clara influencia castellana, esta es una procesión inspirada más en el modelo andaluz, con sus imágenes de origen sevillano cargadas a hombros de los costaleros, sus saetas y sus demostraciones de fervor popular.
El primer Encuentro se remonta a 1993, cuando ambas procesiones confluyeron por primera vez gracias al recordado Jacky Romero, quien no sólo encargó en Sevilla la factura de ambas imágenes, sino que auspició la creación de sus respectivas cofradías y dio forma y sentido a la que es hoy una de las citas principales de la Semana Santa de La Laguna.