El presidente del Cabildo, Pedro Martín, salió ayer al paso de las declaraciones realizadas a DIARIO DE AVISOS por el consejero de Transición Ecológica, José Antonio Valbuena, en las que consideraba “casi inviable” la construcción del puerto de Fonsalía y calificaba de “pérdida de tiempo” iniciar un nuevo estudio de impacto ambiental, “con la exigente legislación actual”, después de que la evaluación anterior caducara en diciembre de 2020.
“Es mucho más populista manifestarse en contra de un puerto que intentar generar desarrollo social, pero yo no quiero caer en el populismo”, indicó a este periódico Martín, que admitió estar “preocupado” con las declaraciones del consejero “porque ya da por sentado que da igual la evaluación ambiental que se haga porque entiende que el puerto no se debe hacer”.
“Olvida que esas evaluaciones establecen unos criterios que pueden estar más o menos acertados, pero que pueden ser analizados y subsanados, y creo que un proyecto que lleva 25 años intentando salir adelante merece que al menos se evalúe ambientalmente antes de poder descartarlo”, señaló Martín, que mostró su extrañeza porque “no se escuche” la opinión de los presidentes de los cabildos. “El consejero no debería precipitarse con unas opiniones que pueden sonar aparentemente bien, pero que deja fuera el criterio de los representantes insulares, con las mismas inquietudes ambientales que cualquier otro, pero pensamos en el desarrollo, en la capacidad de mejorar las comunicaciones, en abaratar los costes del transporte y en facilitar el tránsito de la economía de las islas periféricas”.
Respecto al anuncio del consejero de Transición Ecológica de encargar un estudio a la Universidad de La Laguna sobre los valores ambientales que rodean el entorno de Fonsalía y la Zona de Especial Conservación y que trasladará a la Consejería de Obras Públicas, el presidente del Cabildo invitó a Valbuena a ampliar el informe: “Yo le pediría que encargara un estudio para todas las costas canarias y seguro que nos sorprenderíamos. Porque, si no, parecería que el único objetivo que se plantea ese estudio es poder encontrar una justificación para decir no al puerto”. Además, apuntó que “resulta asombroso que se haga un planteamiento que iría en contra del Gobierno de Canarias y de una reciente aprobación del Parlamento”.
Respecto a Los Cristianos, Martín indicó que “algunos se olvidan de que está en Zona de Especial Conservación y que probablemente no se podrían hacer cambios por una cuestión de respeto medioambiental” e insistió en la idea del trasvase del movimiento portuario del puerto aronero a Fonsalía: “No estamos hablando de un puerto más, sino de trasladar el tráfico marítimo a otro lugar”. La posible alternativa de Granadilla la califica de “ocurrencia”, porque, a su juicio, sería una travesía más complicada por las corrientes, aumentaría el tiempo de los viajes, los consumos energéticos y la factura de mercancías y pasajeros. Y se preguntó: “¿Cómo se pretende mezclar el uso industrial del puerto con el tránsito de personas?”.
Pedro Martín se definió como un “defensor de la fauna marina, faltaría más”, y pidió fijar criterios de protección para los puertos de las Islas. “Yo soy de Guía de Isora y garantizo que las ballenas no solo están allí. ¿O nos hemos olvidado de los accidentes del Jet Foil entre Santa Cruz y Las Palmas de Gran Canaria?”.