DIARIO DE AVISOS reveló el pasado 28 de agosto que el legendario Castaño de las Siete Pernadas, situado en Aguamansa, en las cumbres de La Orotava y catalogado como uno de los árboles históricos y monumentales de Canarias, con 500 años de antigüedad, había quedado herido de muerte por el incendio. Las llamas penetraron en el tronco hueco del árbol y lo devoraron por dentro.
Efectivos de las Brigadas Forestales de Tenerife (Brifor), dependientes del Cabildo, han decidido aplicarle espumógeno con el fin de reducir la combustión interna del tronco en un último intento por salvar al mítico ejemplar.
La misma actuación la han realizado en otros castaños centenarios de los altos de La Orotava que también se vieron afectados por el incendio.
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